viernes, 18 de abril de 2008

“Por fortuna que Silvio está”

Ese fue el estribillo de la campaña electoral que llevo al aplastante triunfo de Silvio Berlusconi en las elecciones italianas de la semana recién pasada. “Cambio” no era precisamente la descripción de los ánimos pre electorales y, por tercera vez, el país de la bota sera dirigido por el polémico poli-empresario.

El viraje a la derecha de Italia es incuestionable. El triunfo de Berlusconi y de la derecha en el Senado y en la Cámara de Diputados, en particular a través de la Lega Nord (partido antiglobalización, racista y secesionista), significará probablemente 5 años de estabilidad política, en un país que en 30 años ha tenido 27 gobiernos.
Mucho de este resultado se debe a los numerosos problemas que ha debido y deberá seguir enfrentando el país como la crisis de la basura en Nápoles, la presencia de dioxinas en la mozzarella -uno de los principales productos de exportación-, además de las proyecciones de crecimiento económico mas bajas de la región.
La actual mayoria derechista significará cambios importantes para un pais que desde hace años, cuestiona su Constitución pero sobretodo la ley electoral. Berlusconi hará cambios, nadie lo duda. La pregunta en Italia y en Europa es si será en su propio beneficio o en el del pais.

Berlusconi: perfil...o prontuario?

“De rey del ladrillo a rey de la TV, de rey de la politica a rey del gobierno”. Esta es una de las frases con que se suele resumir la carrera pública de Silvio Berlusconi (71 años). Según la revista norteamericana Forbes, su patrimonio estimado en casi 10 mil millones de dólares lo convierte en el tercer hombre más rico de Italia y lo ubica en el selecto grupo de los 100 a nivel mundial.
En el lejano 1961, despunta Berlusconi como exitoso emprendedor inmobiliario. Con varias empresas, la mayor parte de ellas con financiamientos de origen suizo, edifica “Milano 2”, una lujosa ciudad satelite de 712 mil mt2 en la que una década después instalará el primer canal de television por cable en Italia. Este será tambien el primer engranaje de su imperio mediático.
La exitosa – e intrincada- carrera de Berlusconi como empresario inmobiliario será reconocida por el gobierno en 1977 con su nominación como “Caballero del trabajo”. De ahi il Cavaliere.
Gracias a su cercania con el socialista Bettino Craxi, en la época lider del gobierno, una sentencia de la Corte Constitucional abre a los privados la participación en las emisiones televisiva, hasta esa fecha exclusiva del Estado a traves de RAI. Asi il Cavaliere reconvierte el canal por cable de su ciudad modelo para transformarlo en una red nacional abierta.
Ese fue sólo el inicio. En la primera mitad de los 80 adquiere los canales Italia 1 y Rete 4, del grupo editorial Mondadori. Luego sus redes se alargan tambien por Europa: funda “La Cinq” en Francia (el primer canal galo de TV privado y gratuito, con un polémico fin), la alemana Telefunk (cerrada en 1992) y la española Telecinco (1990), que transmite actualmente, y que lo tuvo en vilo con un proceso judicial en su contra encabezado por el Juez Baltazár Garzón.
Gracias a la mayoria parlamentaria, durante sus dos gobiernos, controló no sólo las 3 señales de su propiedad, sino también los 3 canales de la RAI, razón justificada para considerar que el principio de la igualdad de condiciones en los medios fue, por decir lo menos, transgredida.
Convertido en accionista mayoritario de la casa editorial Mondadori y, a través de esta también de Einaudi y de otras editoriales menores, Berlusconi se transforma en el principal editor italiano de libros y diarios, con inversiones en México, Venezuela, Argentina y Chile.
Pero no sólo de edificios, TV y editoriales vive Berlusconi, también del deporte. Desde 1986 es propietario del ACMilan.
Lanzado absolutamente en el mundo de los negocios, para Berlusconi la politica no fue más que un interes en la medida que esta le ayudaba a cumplir sus objetivos. Fue asi como simpatizó publicamente con el socialismo hasta 1993, un año despues y dos meses antes de la elecciones, nace Forza Italia, parte de la Coalición derechista “Casa de la Libertad” con que il Cavaliere llegó por primera vez al gobierno.
Su primera –y breve- experiencia fue en el 1994, más exitosa aquella del 2001 que, luego la reelección, prolongó su presencia como Primer Ministro de Italia hasta el 2005 y ahora, la campaña 2006 lo lleva nuevamente a Palacio Marino, la casa de gobierno italiana.

Pero...
Sin embargo, esta historia de éxitos empresariales y políticos tiene también otra cara. Desde el inicio de su carrera empresarial, il Cavaliere arrastra una lista de procesos judiciales, muchos prescritos (varios de ellos gracias la dilatacion judicial impulsada por sus bien pagados abogados), otros en suspensión gracias a leyes dictadas a la medida (como aquella que establece que las 5 principales autoridades del pais no pueden sometidas a proceso), mientras que los pocos que no ha logrado sobrepasar, no serán un problema, afirman los entendidos.
La pregunta número uno en la historia judicial de Berlusconi es el origen de los recursos para iniciar su actividad empresarial. Hasta ahora la respuesta no existe, porque aquellos fondos suizos están protegidos por el secreto bancario del pais helvético.
Mientras entre los últimos casos pendientes, el más relevante es el de Mediaset, en que la Fiscalia de Milán acuso a una decena de personas, entre ellas al ex y futuro Primer Ministro de fraude fiscal, falsedad en balance y apropiación indebida en la compraventa de derechos de transmisión de peliculas estadounidenses por parte del grupo televisivo.
Pero el elenco de las acusaciones es largo y varias de ellas se repiten en sus más de 40 años de trabajo: perjurio ante los Tribunales de Justicia, fraude fiscal, corrupción en sus más variados estilos (ante la Guardia de Finanzas, judiciaria, etc.) y asociación mafiosa por sus relaciones –familiares y personales- con la Cosa Nostra, entre otras.
De hecho, figura como un hito la declaración de Berlusconi luego de la muerte de Vittorio Mangano en la cárcel, el ano 2000. “Es un héroe”, dijo, señalando que el hombre que habia trabajado como administrador de su Villa en Arcore por dos años, no habia declarado nunca en su contra.
Mangano, “hombre de honor” de Cosa Nostra, fue inculpado por tráfico de drogas, extorsión y rapto por el juez Paolo Borsellino que investigaba, hasta el dia de su asesinato, los vinculos de la mafia con el mundo empresarial del norte de Italia, en particular en la perla industrial italiana: Milán.
Pero, a la luz de la ultima decisión de las urnas itálicas, todos estos son hechos no resultan relevantes a la hora de decidir el voto.

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